Parece que por fin estamos tomando un poco de conciencia sobre el problema que supone el desperdicio de alimentos. La situación es compleja y la cadena de valor muy larga, por lo que la solución depende de medidas de todos y cada uno de los agentes que participan en la cadena, desde el agricultor hasta el consumidor pasando por distribuidores y fabricantes.
Para ilustrar dicha complejidad adjunto un gráfico procedente del interesante informe Global food losses and food waste – FAO
Como se puede apreciar, los consumidores tenemos mucho que decir para solventar la situación, especialmente en Europa y Norte América más Oceanía. Todavía tenemos más que decir en las decisiones de compra: si los consumidores no seleccionáramos las frutas más bonitas, los supermercados las pondrían a la venta. ¿Acaso seleccionamos en el supermercado aquella fruta que tiene algún defecto aunque sabemos que su sabor es fantástico? Sin duda, muchos no lo hacemos.
Invitamos a leer el informe, meditar sobre la situación y aportar todos nuestro grano de arena.
Descargar informe: